Simon Yates superó en el esprint de Bagneres de Bigorre a Pello Bilbao y Muhlberger y consiguió su primera victoria en el Tour.
“No tenía mucha confianza de que fuera a batir a Bilbao y Mühlberger al sprint. No sabía cómo de rápidos eran. Mi director me dijo que tomara el primero la última curva y funcionó. Tener una victoria de etapa en cada gran vuelta me hace sentirme muy orgulloso”.
La etapa 12 que dio inicio a la jornada de los Pirineos del Tour de Francia. En la que se esperaba una gran lucha entre los favoritos con dos puertos de entidad como Peyresourde y Hourquette d’Ancizan, pero no la hubo. Se resolvió con una escapada de 40 corredores de la cual emergió un trío para jugarse la victoria en la meta de Bagnères-de-Bigorre. Simon Yates (Mitchelton-Scott) demostró su olfato para las fugas y su colmillo para rematarlas imponiéndose en un técnico sprint a Pello Bilbao (Astana Pro Team) y Gregor Mühlberger (Bora-Hansgrohe). El pelotón, pasivo, llegó a meta junto y con 9’30” de retraso respecto al ganador. Así, Julian Alaphilippe (Deceuninck-Quick Step) conserva el maillot amarillo antes de la definitoria contrarreloj de mañana en Pau.